Escritos Libros para nutrir los primeros meses de vida

Algunas veces pensamos que la literatura es un acto asociado exclusivamente a los libros y formatos en los que se leen cuentos e historias a los niños desde que nacen, pero lo que hemos dejado de lado es que está relacionada profundamente con el lenguaje, la forma en que nombramos al otro, en que contamos y cantamos historias, los ritmos, y entonaciones de los versos o arrullos con los que acunamos y brindamos sosiego y sostén a los recién llegados al mundo y de paso a nosotros mismos, que renacemos con la llegada de una pequeña vida a la nuestra.

Muchos estudios y teorías revelan que desde que los bebés están en el vientre y escuchan la voz de su madre, se convierte en el canto que conecta la realidad interna psíquica del bebé con ese mundo que hay en el exterior, ese primer vínculo se construye desde las palabras, la musicalidad que le permite al recién nacido hallar la confianza y tranquilidad en los brazos que lo acunan sonoramente, esa primera experiencia sensorial a través de las palabras, miradas y gestos constituyen un universo simbólico de placer envuelto en caricias literarias para los bebés que serán las bases para el reconocimiento y la presencia del otro en su vida.

En ese orden de ideas, hay una serie de canciones y poemas de nuestra tradición oral que han sido rescatadas desde algunos libros ilustrados para niños(as). Acá mencionaremos una lista de 5 libros que pueden acompañar estos primeros meses de vida.

Los pollitos dicen de Gerald Espinoza

Este maravillosa y clásica canción de infancia, narra con profundidad los cuidados, preocupaciones y atenciones que brinda una madre a sus hijos, mientras satisface sus necesidades y los prepara para dormir.

Duerme Negrito de Paloma Valdivia

Un arrullo que se recoge dulcemente en las palabras de una madre que habla en forma poética a su bebé invitándolo a dormir y adentrándose en el mundo y dura realidad que viven muchas madres. Prepara al bebé de forma melodiosa y acogedora no sólo para el ritual del sueño sino que también para la ambivalencia de la vida, del mundo externo que resulta agobiante o preocupante para muchas madres.

Sana que sana de Cristina Ramos

Este canto, arrulla los llantos de quienes en brazos de sus cuidadores se consuelan con las atenciones y besos que curan cualquier mal.

Arepita de Manteca de Rosana Faría

Este canto tradicional recoge todas las rimas que hacen de la oralidad un juego acompañados de movimientos y palabras que relatan las costumbres que inscriben en la cultura a los niños(as) mediante la memoria de los cuerpos.

El libro que canta vuelto a contar por Yolanda Reyes

Este libro acompaña a través de la poesía la experiencia literaria de los bebés desde antes de nacer, se convierte en un objeto que une la experiencia familiar con la del bebé para transitar desde un universo de palabras simbólicas la llegada y el crecimiento que va acompañado del descubrimiento del mundo en la infancia.

Estos son algunos de los libros que hacen de los primeros meses de vida una experiencia amorosa envuelto en palabras y afecto entre quienes leen y quienes nutren su mundo mediante la oralidad. Por esta razón, uno de los primeros libros sin páginas que los bebés leen como lo menciona Evelio Cabrejo, son los rostros de quienes los cuidan, este acercamiento está envuelto en palabras y expresiones corporales de las figuras que cantan, hablan y arrullan la vida de los recién nacidos otorgándoles un lugar en la existencia en la vida del otro. Son estas vivencias sensoriales que viajan a través de la voz, las que alimentan y preparan la facultad del lenguaje, de lo inteligible en la primera infancia.