Escritos Bitácora segundo encuentro literario Zipaquirá-Rio Frío

Bitácora segundo encuentro literario Zipaquirá-Rio Frío

El pasado 5 de febrero tuvimos nuestro segundo encuentro del año. En este exploramos nuevos autores con historias y situaciones particulares que nos permitieron jugar con las palabras y trabajar la memoria, construyendo una experiencia diferente con los libros desde el juego.

En esta ocasión jugamos con los textos de atrapados, ¿Qué es el amor?, Te reto a no bostezar, quiero un gato, siento un pie! Y el largo, largo libro de los cerdos. En el juego de palabras que exploramos en estos textos nos permitimos crear nuevas palabras, interactuar en un combate por no bostezar e interactuar con fonemas en las acciones que se presentan, particularmente nos encontramos con un interés profundo en este juego de crear palabras a partir de partir palabras existentes en el caso de los animales e interactuar con fonemas con el constante yam yam del largo libro de los cerdos y el juego de no bostezar (porque no es fácil resistir un bostezo). Todos estos libros prestados, que enriquecen nuestros encuentros, amplían la relaciones que se crean con la literatura y permiten crear espacios únicos de relacionarnos con diversas realidades.

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Contar con la participación de infancias de diferentes edades, permite que nuestros encuentros no sean iguales. Cada vez que nos encontramos los niños y las niñas llegan con nuevas historias, con narraciones diferentes que se consolidan y se evidencian en las intervenciones generando una interrelación entre la experiencia y las historias propuestas desde la literatura.

El baile, el canto y la música, también tuvieron un lugar importante en nuestro encuentro dando espacio a la socialización desde la expresión corporal compartiendo emociones y fortaleciendo procesos de autoestima. Estos espacios y los encuentros nos han mostrado lo importante que es compartir con los niños y niñas, escucharlos, jugar con las palabras y explorar nuevas formas de comunicarse con el cuerpo. Por eso creemos firmemente que la participación de los padres en estos espacios es fundamental y aporta muchos elementos que fortalecen procesos en los niños y niñas.